El mítico Luna Park abrió sus puertas para el arte y colorido musical de la musa bahiana. Tras una larga espera, finalmente Ivete Sangalo, se presentó en un escenario multitudinario.
Buenos Aires fue la ciudad elegida por Ivete como parte de la gira internacional que ya la llevó a Paraguay, Portugal e Italia y que continuará en Rivera, Uruguay en octubre próximo, tras una serie de recitales en su país.
Nacida en el interior de Bahía, creció apasionada por la música de las raíces afrobrasileñas. Comenzó a cantar en Salvador y lideró durante cinco años "Banda Eva". En 1999 inició su carrera solista y nunca paró de crecer.
Se define como una mujer apasionada y agradecida. Elogiada por los referentes de la MPB como Caetano Veloso, Gilberto Gil, Bethania y Carlinhos Brown, esta bahiana que creció artísticamente en la tradición de la música de carnaval de Salvador- es hoy referente absoluta en Brasil. Su presentación en Buenos Aires superó las expectativas y puso a todo el Luna Park en movimiento.
Cumplió el deseo propio y de sus admiradores de cantar nuevamente en Argentina, esta vez en un lugar emblemático como el Luna Park, con entradas agotadas. Allá lejos quedó el debut en "Maluco Beleza", un reducto pequeño que la colocó igualmente en los oídos del público local.
La noche del viernes 10 de agosto casi a las 21.30 y con el estadio colmado,Ivete Sangalo irrumpió en escena dando comienzo al recital que se extendió por más de dos horas.
Abrió el show con "Brasileiro" y tras su tradicional saludo de "tô chegando" levantó al público al son de "Acelerâe" uno de sus hits más recientes.
El Luna fue una verdadera fiesta, en la que presentó los temas del álbum grabado en Nueva York "Multishow Ao Vivo: Ivete Sangalo no Madison Square Garden, junto a los mayores éxitos de su extensa carrera. "Cadê Dalila, Festa, Sorte Grande, Berimbau metalizado, Caníbal, Pereré, Na Base do Beijo, Eva", entre otros, hicieron delirar al público que no paró de bailar junto a Ivete.
"Esta noche vamos a comenzar un gran romance, expresó la cantante en el inicio y se llevó la primera ovación de los miles de admiradores que le devolvieron con aplausos sus palabras.
El estadio entero estalló de alegría y desde allí nadie paró de cantar y bailar.
"Estoy muy feliz de regresar a la Argentina" había adelantado en la conferencia de prensa que dio en Alto Palermo, donde se refirió también a las influencias musicales de sus padres y recordó a su madre tarareando en español. " Ya estoy aquí y quisiera volver muchas veces más, no sólo a Buenos Aires sino a otras ciudades" agregó. Plena de simpatía y muy desenvuelta, hizo referencia a su raíz musical.
"No puedo vivir sin el carnaval de Bahía, existe una tradición muy fuerte en la música bahiana que llamamos hoy la música afroabrasileira y la música axé. Soy parte del axé music y me gusta cantar baladas y otras cosas, pero jamás dejaría de cantar la música de Bahía".
Dueña de una personalidad avasallante y con la particularidad de su voz intensa, Ivete hizo del Luna Park una verdadera fiesta, acompañada por su banda de diez músicos, cuatro coristas y seis bailarines.
Tuvo como invitado de lujo a Diego Torres para cantar el tema "Agora já sei- que grabaron juntos en Nueva York en 2010.
Del traje blanco, con sombrero en la apertura, pasó al vestido de colores y larga cola en la segunda parte- y en un momento se quitó los zapatos de altísimos tacos para continuar danzando junto a su cuerpo de bailarines.
Hubo momentos emotivos y de serena conexión con el público, como cuando interpretó "Quando a chuva passar" y todo el estadio coreó el estribillo con ella.
El talento y la energía de Ivete hicieron del show un momento mágico y el publicó -que gozo con los bises- se fue del Luna con el ritmo pegadizo de Danzando, tema del nuevo disco que saldrá a la luz a fines de agosto.
Por @anyberon
